En 2017 decreció la población en las provincias de La Habana, Villa Clara y Sancti Spíritus y en 55 municipios del resto del país al ocurrir más muertes que nacimientos, y esta negativa tendencia al parecer no cambiará en 2018, según informó recientemente Marino Murillo, el superministro que encabeza la denominada Comisión Permanente para la implementación y desarrollo e las reformas económicas en el país.
En 2017 decreció la población en las provincias de La Habana, Villa Clara y Sancti Spíritus y en 55 municipios del resto del país al ocurrir más muertes que nacimientos, y esta negativa tendencia al parecer no cambiará en 2018, según informó recientemente Marino Murillo, el superministro que encabeza la denominada Comisión Permanente para la implementación y desarrollo e las reformas económicas en el país.
Tal situación encendió las alarmas del gobierno cubano, que ha conferido una alta prioridad a una serie de medidas con las cuales pretende revertir esa dinámica demográfica acentuada por el envejecimiento de la población gracias al aumento de la esperanza de vida y la emigración de personas jóvenes en su mayoría.
Las medidas incluyen desde la ampliación de la atención a parejas infértiles en todo el país, hasta algunos incentivos económicos a las mujeres que tengan más de un hijo, y más recientemente la entrega de subsidios a aquellas con tres o más niños para la construcción o rehabilitación de sus viviendas.
No obstante Radio bemba asegura que falta mucho por avanzar para estimular la natalidad porque en la situación actual ?dicen- el factor económico es básico y si resulta muy caro tener y mantener un hijo, más aún lo es si se desea una familia numerosa.
