Con vistas a la celebración en noviembre del 500 aniversario de la fundación de La Habana, las autoridades llevan adelante un conjunto de obras no solo para embellecer la urbe, sino también para ampliar espacios para el disfrute de sus pobladores y visitantes.
Uno de ellas será el Recinto Ferial de Línea y 18, a la entrada de uno de los túneles que une a las barriadas del Vedado y Miramar, y que dará nueva vida a la zona al rescatar las amplias instalaciones de una vieja fábrica de bicicletas abandonada para albergar eventos de gran afluencia como la Feria del Libro, FIART, que reúne cada año las obras de artesanos y artistas de todo el país y del extranjero, y Arte para Mamá, que brinda múltiples opciones para obsequiar a las madres en su día.
Ese centro se encuentra muy cerca de la Fábrica de Arte, igualmente levantado en una antigua planta industrial y que se ha convertido en un lugar emblemático para las vanguardias artísticas y todas las tendencias de la música, lo que permitirá la interconexión de ambas instalaciones.
Asimismo, en la populosa barriada de El Cerro se levanta un centro cultural que beneficiará directamente con opciones de esparcimiento y aprendizaje a niños y adultos de ese popular barrio, habitado mayormente por familias de pocos recursos.
