Alrededor de 600 médicos del contingente ‘Henry Reeve’ que fueron destinados a Guatemala el pasado mes de octubre para ayudar a los damnificados del huracán Stan, han regresado a Cuba. Alrededor de 600 médicos del contingente ‘Henry Reeve’ que fueron destinados a Guatemala el pasado mes de octubre para ayudar a los damnificados del huracán Stan, han regresado a Cuba. El ministro de Salud cubano, José Ramón Balaguer, fue el encargado de recibirles en el aeropuerto y de felicitarles por su solidaridad con el pueblo guatemalteco donde manifestó que «nada causa mayor orgullo que saber lo que ustedes han hecho». Durante unas siete semanas los médicos ofrecieron atención a más de 40.000 damnificados. Para el grupo de profesionales, lo más duro fue ver cómo muchos niños presentaban daños irreversibles por enfermedades que podían haberse solucionado si se les hubiera atendido antes. El huracán Stan asoló el país en octubre de 2005.
