El secretario ejecutivo del Grupo Gubernamental de Perfeccionamiento Empresarial, el coronel Armando Pérez Betancourt, ha presentado esta semana las cifras del Perfeccionamiento empresarial. El secretario ejecutivo del Grupo Gubernamental de Perfeccionamiento Empresarial, el coronel Armando Pérez Betancourt, ha presentado esta semana las cifras del Perfeccionamiento empresarial. Un grupo de empresas que, dentro o fuera, del grupo empresarial propio del Ejército ponen en práctica los sistemas que se introdujeron primero en el entorno corporativo de las Fuerzas Armadas y que, ahora, según Betancourt, el nuevo presidente interino, Raúl Castro, quiere generalizar en todo el tejido productivo.
Al cierre del ejercicio 2006, el modelo del ejército estaba implantado en 767 empresas civiles y 77 militares. Estas empresas aportaron el pasado año el 32,1% de las ventas totales: el 59,8% de las ventas en divisas: el 52,5% de los beneficios, y el 142,4% de la productividad. Según, el coronel Pérez Betancourt el modelo del Perfeccionamiento sería muy sencillo de aplicar, porque basta con que los trabajdores lleguen a la convición de que en su empresa tienen que cumpir con las funciones, facultades, misiones y objeto social que se les ha asignado. Sin embargo, esa filosofía aún no habría llegado a las principales empresas del país.
Mientras tanto, el número de empresas mixtas, en las que las compañías cubanas comparten la propiedad y la producción con grupos internacionales ha vuelto a declinar el pasado año. Según los datos oficiales, ahora habría 236, 22 menos que el pasado año.
Las empresas desaparecidas son, en su mayor parte, pequeñas y medianas. Los datos confirman una estrategia que sigue hace tiempo el Gobierno cubano y que consiste en apostar por alianzas con grandes empresas internacionales en cada sector concreto, a veces en detrimento de algunas asociaciones que se habían desarrollado durante varios ejercicios.
