Tras el devastador paso de los huracanes Gustav e Ike por Cuba, algunos miembros de la Sección de Intereses en La Habana han asegurado ya que el Departamento de Estado estadounidense ha aprobado que se vendan 250 millones de dólares en alimentos y materiales de construcción a la Isla. Tras el devastador paso de los huracanes Gustav e Ike por Cuba, algunos miembros de la Sección de Intereses en La Habana han asegurado ya que el Departamento de Estado estadounidense ha aprobado que se vendan 250 millones de dólares en alimentos y materiales de construcción a la Isla. Medidas como estas ya fueron tomadas por EEUU en ocasiones anteriores, tras el paso del Michele el pasado año 2001, que, por cierto, dio lugar al levantamiento del embargo en el comercio agroalimentario entre ambos países. Sin embargo, la novedad en esta ocasión se encuentra en que las administraciones de la primera economía mundial han permitido que los cubanos no tengan que pagar en efectivo estas compras, y que lo hagan a través de créditos de bancos de terceros países. Nada se sabe aún de quién será el que les financie, pero, lo cierto, es que desde 2001 las relaciones comerciales entre ambos países han ido cambiando hasta el punto de que el año pasado, y a pesar de mantener el embargo oficial, EEUU pasaba a ocupar el quinto puesto de socios comerciales de la Isla.
Cifras
Según cifras del US Cuba Trade and Economic Council, la mayor de las Antillas ha utilizado 2.000 millones de dólares en comprar productos a EEUU en los últimos siete años.
En concreto, fue en 2007 cuando se registró la cifra más elevada, con 437 millones de dólares. Soja, pollo, trigo y aceite ocupan los primeros productos importados por la Isla, con un 70% del total. Este año ya se han utilizado cerca de 58 millones de dólares, pero todo parece indicar que el envío de ayuda a la Isla podría aumentar esta cifra y, tal vez, el nuevo inquilino en la Casa Blanca siga sumando números en los próximos trimestres.
A pesar de esta situación, Cuba rechazó a principios de semana las ayudas de cinco millones de dólares que Washington ofreció tras el paso de los huracanes por la Isla. Ante esta situación, el secretario de Comercio estadounidense, el cubanoamericano Carlos Gutiérrez, aseguraba el pasado miércoles que la Administración Bush distribuirá dos millones de dólares entre las organizaciones no gubernamentales que prestan ayuda humanitaria a la mayor de las Antillas, con el objetivo de que hagan llegar donativos y artículos de primera necesidad a las víctimas de los huracanes.
El ex gobernante Fidel Castro, en un artículo divulgado el martes en La Habana, sostuvo que Cuba no podía aceptar la asistencia de EEUU por una “cuestión de dignidad”.
