La precampaña de las elecciones al Congreso y al Senado de EEUU, previstas para noviembre, favorece al lobby petrolero. La precampaña de las elecciones al Congreso y al Senado de EEUU, previstas para noviembre, favorece al lobby petrolero. Cuba es uno de los epicentros de los discursos políticos, sobre todo en el estado de Florida, más aún tras el derrame de petróleo de BP.
El senador demócrata Bill Nelson, muy relacionado con el lobby, ha exigido a Obama más dureza con las exploraciones que se realizan en las aguas cubanas cercanas al territorio estadounidense.
Sobre el asunto, el portavoz de la secretaria Hillary Clinton, Phillip J. Crowley, afirmó que los vertidos de BP demuestran que para realizar prospecciones petrolíferas o extraer petróleo en este área es necesario tener un protocolo contrastable de medidas de seguridad medioambiental.
