El presidente venezolano, que ha sido operado este mes en Cuba de un absceso pélvico, está aprovechando bien su periplo por la Isla. El presidente venezolano, que ha sido operado este mes en Cuba de un absceso pélvico, está aprovechando bien su periplo por la Isla. Y es que, al margen de los temas médicos que se hayan dado, su visita cobra relevancia al producirse justo después de que el vicepresidente chino, Xi Jinping, se reuniera con los Castro para tratar el tema de la financiación china en el sector petrolero cubano. Chávez no ha querido perder la oportunidad de recordar a Cuba que la financiación china está avalada por el petróleo venezolano. Mientras se recupera de la operación, además, se ha mantenido en estrecho contacto con sus ministros, sin ceder un ápice de autonomía a su gobierno pese a su ausencia.
Semana ajetreada en los mentideros del poder en Cuba. Y el tema estrella parece haber sido, sin duda, el petróleo y su industria relacionada, no sólo por el interés demostrado por la española Repsol. El vicepresidente chino Xi Jinping, según los expertos el más que probable sucesor futuro de Hu Jin Tao, ha visitado la Isla y se ha reunido con Raúl y Fidel Castro para la firma de 13 nuevos convenios bilaterales China-Cuba. El gigante asiático sigue con mucho interés las evoluciones del sector petrolífero, ya que actualmente financia la rehabilitación de la refinería de Cienfuegos. Una financiación que está avalada por el petróleo de Venezuela, cuyo presidente, Hugo Chávez, ha visitado la Isla justo después de la partida de Jinping. ¿Casualidad?
Probablemente, no. El sector del petróleo en Cuba se encuentra en estos momentos en el punto de mira de diversos inversores y países. Parece legítimo pensar que Chávez, en su visita, trató con las autoridades cubanas el tema del interés chino en Cuba y de la financiación de la modernización de la refinería Cienfuegos, que desde la caída del comunismo soviético se ha mantenido en unas condiciones poco eficientes. No en vano, los 6.000 millones de dólares que aporta China en ese proyecto están avalados por el petróleo venezolano, por lo que no extraña el interés de Chávez por conocer de primera mano lo que ocurre.
