LA NUEVA GENERACIÓN al mando en los negocios de la familia Bacardi quiere pasar página, tan rápido como sea posible. LA NUEVA GENERACIÓN al mando en los negocios de la familia Bacardi quiere pasar página, tan rápido como sea posible. O eso parece deducirse de la intención expresada por Joaquin Bacardi, el actual presidente de la compañía ronera, a la revista ‘Just Drinks‘. Este ejecutivo ha asegurado que ya tiene planes concretos para volver a instalar fábricas en Cuba en cuanto EEUU levante el embargo que mantiene sobre la Isla desde hace más de cinco décadas. Él está convencido de que “Bacardi volverá a estar allí algún día”. Sus declaraciones demuestran, según los cubanólogos, el cambio radical que ha dado el clima entre la comunidad cubanoamericana. No hace tanto, la familia Bacardi era una de las principales fuerzas, y fuentes de financiación, del movimiento anticastrista de Miami. Ahora, lo mismo que otros notables como el millonario Alfonxo Fanjul, están dispuestos a olvidarlo todo y buscar oportunidades de inversión en el que es su país de origen, sin necesidad de que antes cambie el sistema político.
