Una encuesta nacional del Ministerio de Salud pública sobre factores de riesgo dio la alarma: casi la mitad de la población cubana padece sobrepeso, cifra que puede aumentar, pues más del 40% de los mayores de 15 años no realiza suficientes ejercicios. Una encuesta nacional del Ministerio de Salud pública sobre factores de riesgo dio la alarma: casi la mitad de la población cubana padece sobrepeso, cifra que puede aumentar, pues más del 40% de los mayores de 15 años no realiza suficientes ejercicios.
Ni siquiera los gimnasios que han proliferado al calor de las reformas económicas, ni la instalación por el Estado de módulos gratuitos en los campos deportivos para hacer ejercicios, parecen detener la tendencia de los cubanos a ser cada día más gruesos y sedentarios.
La solución del problema puede resultar más difícil, pues prevalece la mentalidad de “barriga llena, corazón contento”, y basta con ver a muchos jóvenes que “queman durante horas en el gim” abalanzarse de inmediato a la cafetería más cercana a engullir pizzas y refrescos con la mayor tranquilidad.
Y muchos se sienten encantados con lo que califican como “la curva de la felicidad” mientras se acarician complacidos su pancita, y aseguran que “estoy mejor así que antes”, quizás recordando los duros años 90, cuando a fuerza de mucha bicicleta y pobre alimentación, ser gordo era casi un insulto.
