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Alemania acelera su desembarco en la nueva Cuba

Los últimos compases de la presidencia de Barack Obama en EEUU podrían acelerar aún más los acontecimientos en este segundo año tras el inicio del deshielo entre Washington y La Habana. Una ventana de oportunidades económicas que Alemania se propone no desaprovechar. Para asegurar el terreno, el Gobierno teutón han enviado a la Isla a su número dos, el ministro de Asuntos Exteriores, Sigmar Gabriel, que representa, además, la máxima autoridad del Partido Socialdemócrata, el componente ‘progresista’ de la gran coalición que encabeza la democristiana Angela Merkel. Gabriel, por supuesto, viajará acompañado de una nutrida delegación empresarial.

Gabriel, que además es presidente federal del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD, siglas en alemán), aprovechará su estancia en Cuba para inaugurar un foro empresarial, además de mantener encuentros bilaterales con autoridades gubernamentales.

La visita de Gabriel a la isla constituirá el segundo acercamiento del Gobierno de la canciller alemana, Angela Merkel, después de que Cuba y EEUU anunciaron el 17 de diciembre de 2014 el inicio de un proceso para restablecer relaciones diplomáticas (20 de julio 2015).

Ya el pasado mes de julio el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, realizó un viaje histórico a La Habana, el primero realizado por un jefe de la diplomacia alemana desde su reunificación en 1990.

El ministro alemán cumplió en esa oportunidad una extensa agenda que incluyó un encuentro con el presidente cubano Raúl Castro, además de mantener extensas reuniones con su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, así como con representantes de los Ministerios de Economía y Planificación, Cultura y Comercio Exterior e Inversión Extranjera.

El programa de Steinmeier incluyó una visita a La Habana Vieja, al Estadio Panamericano y al proyecto de Horticultura Alamar, así como la firma de varios acuerdos de cooperación económica y comercial.

La visita ahora de Gabriela a Cuba, como antes de Steinmeier, ocurre cuando la isla negocia con la Unión Europea (UE) desde abril de 2014 la firma de un acuerdo de diálogo político y cooperación.

La finalidad es sacar del estancamiento las relaciones bilaterales por la llamada «Posición común».

La cooperación germana en materia de desarrollo se mantiene bloqueada desde 2003 sin colaboración técnica ni financiera, según informó el Ministerio de Exteriores de Alemania.

De acuerdo con esa misma institución, «Alemania vendió bienes a La Habana por valor de 191 millones de euros en 2014, mientras que las exportaciones cubanas a territorio alemán ascendieron a 33 millones de euros (35,84 millones de dólares)».

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