Los habaneros aseguran que “por lo menos en el tema de los apagones hemos mejorado bastante” y recuerdan los duros años 90 cuando llegaron a ser un tormento cotidiano de seis, ocho y más horas, de día o de madrugada, mientras que en la actualidad sorprenden a muchos cuando ocurren. Los habaneros aseguran que “por lo menos en el tema de los apagones hemos mejorado bastante” y recuerdan los duros años 90 cuando llegaron a ser un tormento cotidiano de seis, ocho y más horas, de día o de madrugada, mientras que en la actualidad sorprenden a muchos cuando ocurren.
Para la mayoría, la eliminación de los apagones es uno de los logros de la denominada Revolución Energética que llevó al cambio de casi todos los electrodomésticos estadounidenses de los años 50 y de la era soviética por otros más modernos, aunque con el tiempo acarreó grandes dolores de cabeza a las familias por la falta de piezas de repuesto y el incremento posterior de las tarifas de la electricidad.
Recientemente, la Unión Eléctrica, empresa que controla la generación en el país anunció el sobrecumplimiento con creces de sus planes y, en especial, en la estabilidad alcanzada en el Sistema Electroenergético Nacional, lo que permitió, según sus especialistas, la reducción del tiempo de interrupción del servicio a los clientes a sólo 29,3 horas como promedio al año, el más bajo –dicen- desde que se lleva ese registro.
Muchas esperan que tal estabilidad continúe y no sea solo un buen momento transitorio, y que los apagones queden como un recuerdo del “Período Especial”.
