La apertura de un hotel en La Habana administrado por la cadena estadounidense Starwood Hotels & Resorts Worldwide junto con el grupo Gaviota, ha levantado expectativas tanto en la prensa internacional como en La Habana, donde el Four Points by Sheraton, antes Quinta Avenida, es la noticia del momento. La apertura de un hotel en La Habana administrado por la cadena estadounidense Starwood Hotels & Resorts Worldwide junto con el grupo Gaviota, ha levantado expectativas tanto en la prensa internacional como en La Habana, donde el Four Points by Sheraton, antes Quinta Avenida, es la noticia del momento.
Para las autoridades del Turismo es un acontecimiento “histórico”, aunque a una funcionaria del hotel “se le fue la mano” y calificó la presencia de la empresa yanqui como un gesto de “hermandad y colaboración”, con lo cual dejó boquiabiertos a no pocos parroquianos mientras otros optaron por desternillarse de risa.
Más allá de esa anécdota, Radio bemba se pregunta cómo la cadena estadounidense logró encontrar un resquicio del embargo-bloqueo, que se mantiene a pesar de los forcejeos del presidente Obama, y dicen que Starwood debiera “darle la receta a otras empresas” que no acaban de decidirse o no pueden entrar en la isla.
Para otros los precios (cuesta 249 dólares la noche la habitación más barata) es como una señal de que Starwood, que también tiene en la mira al emblemático “Inglaterra”, prepara el terreno para los “yumas” adinerados, y le dice con elegancia “búsquense otro lugar más barato” al resto de los turistas, la mayoría de modestos recursos.
