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Los calurosos comienzos de los veranos cubanos siempre aumentan un poco la tension social de la poblacion

En 15 días...

Con los primeros compases del verano en Cuba regresa también el relativo aumento de la tensión social que provoca el calor, sobre todo si viene acompañado de inesperados apagones. Una plaga energética con la que los cubanos han luchado muchos años y que, en algún momento reciente, creyeron haber desterrado para siempre. Con los primeros compases del verano en Cuba regresa también el relativo aumento de la tensión social que provoca el calor, sobre todo si viene acompañado de inesperados apagones. Una plaga energética con la que los cubanos han luchado muchos años y que, en algún momento reciente, creyeron haber desterrado para siempre. La falta de energía eléctrica, aunque sea temporal, provoca incomodidades de todo tipo. Desde las que pueden ser obvias para un ciudadano de un país donde estas cosas no suelen pasar a otras, como el devastador efecto que puede tener sobre los alimentos, un bien que no siempre sobra en la Isla, la desconexión forzosa de un frígorifico, que, además, en ocasiones, queda inservible por culpa de las subidas y bajadas de tensión.

En paralelo con esta circunstancia, se vienen observando tanto en la capital del país, como en las provincias, un cierto deterioro de los transportes públicos que no ayuda a mejorar el humor de los sufridos ciudadanos.

La cuestión del tránsito podría deberse a dos factores distintos, cuya coexistencia tampoco es descartable y ambos están relacionados con la falta de renovación del parque de autobuses, ya sea porque las “guaguas” que tenían que haber llegado de China y Rusia se retrasan o por el hecho de que faltan piezas de recambio para arreglar aquellas que podrían funcionar si se reparasen. Y este último punto podría estar relacionado, según algunos dicen, con el hecho de que todas las compras de suministros que las empresas de la Isla deben realizar en dólares necesitan la autorización previa del Banco Central.

Sea como sea, los ciudadanos se enfrentan a un nuevo estío caliente y empiezan a dudar de que las reparaciones efectuadas sobre la central de Antonio Guiteras tuvieran éxito como se les dijo. Sobre todo, porque fue esta avería, el pasado verano, la que marcó el regreso de los apagones.

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