Se dice en Radio Bemba que “el boom inicial en la venta de casas pasó a la historia” y que cada vez son menos los que se lanzan a comprar una vivienda, porque al parecer los que tenían mucho dinero acumulado cuando se liberó el mercado inmobiliario hace cinco años, ya lo invirtieron. Se dice en Radio Bemba que “el boom inicial en la venta de casas pasó a la historia” y que cada vez son menos los que se lanzan a comprar una vivienda, porque al parecer los que tenían mucho dinero acumulado cuando se liberó el mercado inmobiliario hace cinco años, ya lo invirtieron.
Algunos pretenden confirmar esta tendencia con lo que se ve en las páginas dedicadas al tema en Internet, donde “lo que más camina” es la venta de apartamentos pequeños, relativamente baratos, “que vuelan de un día para otro, mientras que las propiedades muy caras se mantienen mes tras mes sin compradores”.
Hay quienes aseguran que en vez de ser un problema, esto es algo positivo, “porque los precios de muchas casas meten miedo”, mientras otros se ríen de que “una casona en el Vedado cuesta tanto como un pent house en Miami” y aseguran que más temprano que tarde los vendedores tendrán que volver a la cordura.
Ese criterio lo comparten muchos potenciales compradores, que buscan, rebuscan y regatean en las inmobiliarias privadas o por su propia cuenta con el criterio de que “los precios tienen que seguir bajando “hasta lo razonable”, aunque algunos vendedores piensan diferente, pues ven en la venta de su casa el capital que le asegurará el futuro.
