A raíz del anuncio de Donald Trump de hace escasas semanas, de una nueva política para Cuba; un grupo de empresarios cubanos ha dirigido una carta a los Departamentos de Estado, Hacienda y Comercio de EE.UU. en la que destacan formas específicas en las que las agencias reguladoras podrían elaborar políticas que apoyen al sector privado de la Isla. A raíz del anuncio de Donald Trump de hace escasas semanas, de una nueva política para Cuba; un grupo de empresarios cubanos ha dirigido una carta a los Departamentos de Estado, Hacienda y Comercio de EE.UU. en la que destacan formas específicas en las que las agencias reguladoras podrían elaborar políticas que apoyen al sector privado de la Isla.
Se acogen a que durante el discurso de Trump en la Little Havana de Miami, al tiempo que el presidente estadounidense se refería a su voluntad de no beneficiar a las autoridades de la Isla, mencionó también la necesidad de fomentar el incipiente sector privado en Cuba como principios básicos para los cambios normativos en su política hacia el país caribeño.
Por ello, este grupo de emprendedores solicita ahora que la Administración Trump facilite a los cubanos la apertura de cuentas bancarias en su país, que permita los viajes individuales de los estadounidenses a la Isla; y que deje que los empresarios cubanos tengan más acceso a las exportaciones estadounidenses.
Sin embargo, este mismo grupo señala también su temor por que el endurecimiento de las regulaciones anunciado por Trump sirva en último término para perjudicar al sector privado cubano, por lo que instan al Gobierno de EE.UU. a continuar ?el diálogo y la cooperación con el Gobierno cubano y otras entidades cubanas?.
Un temor que no parece desorientado después de que tras haber recibido 20 millones de dólares en el anterior año fiscal, la primera propuesta presupuestaria del presidente de EE.UU., presentada en mayo, eliminase las partidas destinadas a Cuba. Ahora, el grupo de los republicanos en la Cámara de Representantes de EE.UU. ha incluído en su propuesta una «ayuda» para Cuba; que iría destinada a ?promover la democracia? en el país.
Es decir, las prioridades de la actual Administración estadounidense se stiúan lejos de las prioridades señaladas por los emprendedores de la Isla en su carta. Entre los firmantes de ésta, según recoge Cubanet, destacan figura como Nidialys Acosta y Julio Álvarez, cofundadores de NostalgiCar, un taller de restauración para automóviles clásicos estadounidenses y servicio de autos de lujo; o Robin Pedraja, fundador de Vistar Magazine, una publicación digital independiente cubana.
También Reymel Delgado, fundador del Estudio 50, un negocio de producción audiovisual en Cuba; Niuris Higueras Martínez, fundadora del Atelier, uno de los paladares (restaurantes) más exitosos de La Habana; Celia Mendoza, fundadora del Concierge Habana, que ofrece servicios VIP y especializados a visitantes extranjeros; Julia de la Rosa, copropietaria del hostal La Rosa de Ortega B & B, que aparece en Airbnb, o Yamina Vicente, fundadora de Decorazon, una empresa de planificación y decoración de fiestas.
