La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de EE.UU. (OFAC) ha realizado una nueva publicación en su sección de ?Preguntas Frecuentes? que amplía las restricciones que incluiría la nueva política del país norteamericano en relación a la posibilidad de sus ciudadanos de viajar Cuba, según ha desvelado El Nuevo Herald. La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de EE.UU. (OFAC) ha realizado una nueva publicación en su sección de ?Preguntas Frecuentes? que amplía las restricciones que incluiría la nueva política del país norteamericano en relación a la posibilidad de sus ciudadanos de viajar Cuba, según ha desvelado El Nuevo Herald.
Y es que desde que el presidente estadounidense Donald Trump anunciase el pasado 19 de junio en la Little Havana de Miami, su nueva política hacia Cuba, se sabía que los viajes individuales ‘people to people’ utilizada por los estadounidense para ‘disimular’ sus viajes turísticos a la Isla quedaría sin efecto.
Pero ahora la OFAC ha añadido que la nueva política «afectará también a ciertas categorías de viajes educativos, así como a viajes en apoyo al pueblo cubano?, sin añadir más explicaciones. Con todo, hasta que se publiquen las nuevas reglas, para la que no hay una fecha específica todavía, los viajeros norteamericanos podrán continuar visitando Cuba bajo las 12 categorías de viajes permitidas durante la administración Obama.
Asimismo, según señala también la cabecera de Miami, la OFAC ha ampliado la definición de miembros del gobierno cubano que no pueden recibir remesas de EE.UU. a los secretarios y primeros secretarios de la Central de Trabajadores de Cuba, así como a los principales editores de todos los medios de comunicación estatales.
Por el contrario, en el lado positivo, la OFAC ha señalado que las personas que viajen a Cuba legalmente bajo las categorías de viajes permitidos no tendrían que solicitar licencias. Y que las empresas estadounidenses con negocios acordados con el Gobierno cubano antes de la fecha en que se publiquen las nuevas regulaciones, podrán continuar con sus transacciones.
Ello incluso aunque dicho acuerdos aún estén pendientes de materializarse y pese a que, eso sí, después de que se emitan las nuevas regulaciones, la política de Trump prohibirá cualquier nueva transacción directa con cualquier entidad relacionada con los militares, la inteligencia o seguridad cubanos.
