Las autoridades del Ministerio de Turismo de Cuba aseguran que las instalaciones hoteleras del país se recuperarán de los estragos del huracán Irma y que “estarán listas en tiempo record” para la emporada alta, que se inicia en noviembre. Las autoridades del Ministerio de Turismo de Cuba aseguran que las instalaciones hoteleras del país se recuperarán de los estragos del huracán Irma y que “estarán listas en tiempo record” para la emporada alta, que se inicia en noviembre.
Tras el devastador panorama que dejó en todo el país el meteoro, en Radio bemba muchos expresaban su preocupación por el estado de las instalaciones turísticas en los principales polos del país: La Habana, Varadero y la cayería del norte de la región central de la isla, toda vez que el turismo es hoy una de las principales fuente de divisas y ahora más que nunca se necesita dinero fresco para restañar los destrozos.
Pero por suerte, según el viceministro primero de Turismo, Alexis Trujillo, el poderoso huracán no destruyó ningún hotel y los daños se limitaron a roturas de cristales, falsos techos y cubiertas ligeras, más sensibles al embate de los vientos, y daños causados por la penetración del mar en algunos de ellos, según corroboraron las empresas cubanas Gaviota y Cubanacán y las españolas Iberostar y Meliá.
Así, en la Habana solo los hoteles que se levantan junto a la costa sufrieron daños y ya la mayoría están abiertos; en Varadero no se interrumpieron los servicios ni tampoco en el importante polo de Holguín, en el oriente del país.
