Para los habitantes de La Habana un fantasma ha resurgido, el de los largos apagones, que amenazan con presentarse en lo inmediato y durar al menos unos meses, después de un largo tiempo en que los cortes de luz se redujeron al mínimo. Para los habitantes de La Habana un fantasma ha resurgido, el de los largos apagones, que amenazan con presentarse en lo inmediato y durar al menos unos meses, después de un largo tiempo en que los cortes de luz se redujeron al mínimo.
Ello, a consecuencia del huracán Irma, que provocó la paralización total del sistema electroenergético nacional, en parte de forma inducida para evitar males mayores, y sobre todo por los destrozos causados por la fuerza de los vientos, que echaron por tierra miles de postes eléctricos, afectaron 2.300 circuitos de distribución, y lo peor, dejaron fuera de servicio durante un buen tiempo a la termoeléctrica Antonio Guiteras, de la occidental ciudad de Matanzas, la más potente y eficiente del país en la actualidad.
Ello podría provocar que aun cuando se restablezca el servicio en todas partes, no haya suficiente capacidad generadora para satisfacer la demanda hasta tanto la ?Guiteras? comience a generar electricidad.
En la capital, numerosos barrios han permanecido durante más de cinco días sin electricidad, pero en la región central del país, según reportes, la situación es mucho peor y por la cuantía de los daños todas las provincias han tenido que ir restableciendo el servicio contando solo con sus propios recursos.
