Como parte de los esfuerzos de las autoridades cubanas para que el país caribeño llegue a la que es su temporada alta de turismo con las instalaciones afectadas por el huracán Irma plenamente recuperadas, se ha anunciado hoy que el aeropuerto internacional Jardines del Rey, de Cayo Coco, ha reiniciado sus operaciones. Como parte de los esfuerzos de las autoridades cubanas para que el país caribeño llegue a la que es su temporada alta de turismo con las instalaciones afectadas por el huracán Irma plenamente recuperadas, se ha anunciado hoy que el aeropuerto internacional Jardines del Rey, de Cayo Coco, ha reiniciado sus operaciones.
Un anuncio, difundido a través de Prensa Latina, que sirve tanto para enviar un mensaje en el sentido de que las jornadas de trabajo están siguiendo el curso previsto, como para enviar un mensaje de tranquilidad a los principales agentes del sector de que, pese al paso por el litoral norte de Cuba a principio del pasado mes de septiembre del Irma, todo estará listo para noviembre.
O lo que es lo mismo, que tanto los hoteles como las diferentes instalaciones turísticas estarán a punto para la inminente temporada alta, que en Cuba se considera que tiene lugar desde noviembre hasta abril, y podrán seguir recibiendo visitantes al ritmo de crecimiento récord de los últimos años.
Y es que, desde el anuncio del ‘deshielo’ entre Washington y La Habana de finales de 2014, el número de visitas a la Isla no ha parado de aumentar, siendo los turistas estadounidenses el principal vector de dicho crecimiento. Así por ejemplo, precisamente el aeropuerto de Cayo Coco llegó a recibir en 2016 hasta 60 vuelos semanales.
Un incremento tanto de nuevas líneas aéreas como en la capacidad de los aviones que se ha visto doblemente amenazado por los efectos de fenómenos meteorológicos como el Irma y por el enfriamiento en las relaciones entre Cuba y EE.UU. tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, desde donde ha buscado reinstaurar algunas de las antiguas restricciones.
Sin embargo, los principales agentes del sector turístico en EE.UU. ya han manifestado que ni tienen intención de sucumbir a las presiones de la nueva Administración, ni tampoco creen que éstas vayan a ser suficientes para frenar el crecimiento de visitas hacia la Isla desde el país norteamericano.
Algo que tampoco tiene visoso de suceder por los daños del temporal ya que incluso las zonas más afectadas por el Irma, como es el caso de este aeródromo de Cayo Coco, ubicado en la costa norte de la provincia de Ciego de Avila y cuya terminal aérea perdió sus cubiertas como resultado de los fuertes vientos, se están recuperando a tiempo.
