A diferencia de otros establecimientos, de grandes dimensiones y situados en puntos turísticos de sol y playa, Meliá Hotels International ha apostado por incorporar a su cartera en Cuba, que opera bajo la marca Meliá Cuba, cinco nuevos establecimientos en edificios con valor histórico situados cerca de los cascos céntricos de sus principales ciudades.
A diferencia de otros establecimientos, de grandes dimensiones y situados en puntos turísticos de sol y playa, Meliá Hotels International ha apostado por incorporar a su cartera en Cuba, que opera bajo la marca Meliá Cuba, cinco nuevos establecimientos en edificios con valor histórico situados cerca de los cascos céntricos de sus principales ciudades.
Aunque la cadena española mira con especial atención a Asia como el mercado con mayor potencial de expansión, tampoco se ha olvidado de Cuba y, durante el primer trimestre de 2018, la hotelera ha incorporado cinco nuevos hoteles, que suponen un parque adicional de 409 habitaciones en el país caribeño.
Pero sobre todo llama la atención que estos establecimientos son todos de un tamaño pequeño o mediano y, especialmente, que se encuentren en los cascos históricos de enclaves urbanos declarados patrimonio de la humanidad. Así, en Cienfuegos, se sitúan el hotel La Unión, el Jagua, y el Meliá San Carlos; y en Camagüey, lo hacen el Hotel Colón y el Gran Hotel.
Es decir, frente a la oferta de ‘sol y playa’ característica de otras cadenas y, hasta ahora, de la propia Melíá en la Isla; la hotelera española presenta alternativas complementarias para que sus usuarios prolonguen su estadía media en el país caribeño a través de estos nuevos establecimientos.
En definitiva, Meliá pretende que los visitantes al país caribeño puedan ‘equilibrar’ el disfrute de sus ‘resorts’ de ‘sol y playa’ con modalidades turísticas de tipo más ‘urbano’ o ‘cultural’. Por ello, los establecimientos citados no serán las únicas adiciones a su portafolio de establecimientos en la Isla ya que, cuando termine sus trabajos de rehabilitación, se abrirá también el Innside Camagüey orientado al mismo segmento.
Y, para el 2020, Meliá aún sumará tres establecimientos más. En este caso, en la ciudad de Trinidad, que cuenta con un importante valor arquitectónico de la época colonial. Allí, los nuevos hoteles serán el Meliá Trinidad, el Meliá Punta Ancón, y el actual hotel Ancón, que se reconvertirá en el Sol House Ancón.
Con todo, conforme a esa estrategia de ‘diversificación complementaria’, la hotelera española abrirá con anterioridad, a finales de 2018, dos nuevos buques-insignia en Varadero y Cayo Santa María: el ‘Meliá Internacional’, con 934 habitaciones, y el ‘Paradisus Los Cayos’ con 802 habitaciones; éstos sí orientados a la oferta de ‘sol y playa’.
Esta nueva apuesta de la hotelera, que actualmente cuenta con 29 hoteles en Cuba y ya fue la primera española en llegar a la Isla, hace más de un cuarto de siglo, supone reafirmar su compromiso con el desarrollo del sector en sintonía con los planes de desarrollo de las autoridades del país caribeño.
En esta línea, Gabriel Escarrer, vicepresidente y consejero delegado de Meliá Hotels International, ha declarado que ”en el marco de nuestro profundo compromiso con la mejora del modelo de turismo cubano, tenemos la oportunidad de poner en valor ciudades únicas y con un potencial turístico excepcional, como Cienfuegos, Camagüey, Santiago de Cuba, o La Habana, garantizando, desde el oriente al occidente de la isla, el servicio y la calidad internacionalmente reconocidos de Meliá”.
