Trump destituye a De Laurentis

Cuando ni tan siquiera ha trascurrido un mes del discurso de Donald Trump en la ‘Little Havana’ de Miami en el que anunciaba un giro en la política de ‘deshielo’ de su predecesor Barack Obama hacia Cuba; EE.UU. ha reemplazado a Jeffrey DeLaurentis como principal responsable de su Embajada en la capital del país caribeño. Cuando ni tan siquiera ha trascurrido un mes del discurso de Donald Trump en la ‘Little Havana’ de Miami en el que anunciaba un giro en la política de ‘deshielo’ de su predecesor Barack Obama hacia Cuba; EE.UU. ha reemplazado a Jeffrey DeLaurentis como principal responsable de su Embajada en la capital del país caribeño.

DeLaurentis ha sido un hombre clave en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre los dos países, e incluso había sido propuesto como Embajador por el expresidente Obama, aunque el nombramiento nunca llegó a concretarse; por lo que, formalmente, su puesto era el de encargado de negocios.

Además, en el momento de dicho nombramiento nunca concretado, en septiembre de 2016, Obama alabó a De Laurentis señalando que no había «ningún servidor público más adecuado para mejorar nuestra capacidad de hacer participar al pueblo cubano y promover los intereses de EE.UU. en Cuba que Jeff». Y lo cierto es que el diplomático ya había sido funcionario consular en La Habana entre 1991 y 1993.

También, jefe de la división económica y política de la entonces Sección de Intereses, entre 1999 y 2002. Es decir, un hombre con un gran conocimiento de la Isla; mientras que ahora, le reemplazará de forma interina su hasta el momento número dos: Scott Hamilton. Un hombre con un perfil no tan marcado y que, por ejemplo, ha sido asesor político del Representante Permanente de EE.UU. ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), entre 1997 y 1999; o ha trabajado en las sedes diplomáticas de su país en Ecuador o Colombia

Las características de este nombramiento con caracter interino hacen pensar que son una señal de las dificultades de la Administración Trump para cubrir los puestos que necesita; pero sobre todo en que este movimiento tiene un significado político que se ha querido hacer notar no demorando más el relevo. Así, los nuevos tiempos vendrán marcados por un tono de mayor hostilidad hacia la Isla.

No en vano, aunque Hamilton era ya el número dos de la Embajada; no es percibido como un hombre cercano a Obama, como si era percibido De Laurentis. Además, según fuentes diplomáticas, se espera que continúen los relevos de diplomáticos estadounidenses desplazados al país caribeño durante las próximas fechas.

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