Victoria COOMBS Directora Nacional de Política de Empleo del Ministerio de Trabajo

En declaraciones a la agencia Prensa Latina, la directora nacional de Política de Empleo del Ministerio de Trabajo de Cuba, María Victoria Coombs, asegura que la Isla tiene una estrategia muy clara en lo que respecta al empleo: conseguir que todos los ciudadanos del país tengan un trabajo digno. Las cifras avalan los resultados de la estrategia emprendida. En 2005, el país caribeño consiguió reducir su tasa de desempleo hasta el 1,9% de la población activa. Un guarismo que, según los estándares internacionales, se considera indicativo de una situación de pleno empleo. Ahora el resto es aumentar la calidad. En declaraciones a la agencia Prensa Latina, la directora nacional de Política de Empleo del Ministerio de Trabajo de Cuba, María Victoria Coombs, asegura que la Isla tiene una estrategia muy clara en lo que respecta al empleo: conseguir que todos los ciudadanos del país tengan un trabajo digno. Las cifras avalan los resultados de la estrategia emprendida. En 2005, el país caribeño consiguió reducir su tasa de desempleo hasta el 1,9% de la población activa. Un guarismo que, según los estándares internacionales, se considera indicativo de una situación de pleno empleo. Ahora el resto es aumentar la calidad.

-¿Cuáles son las líneas maestras de la estrategia que aplica el Gobierno cubano para impulsar la creación de empleo?

-La estrategia cubana para la creación de empleo se rige por el principio que enunció el presidente Fidel Castro, cuando afirmó que ninguna persona sobra en el país. Y, desde el triunfo de la Revolución cubana en 1959 se busca prioritariamente que el crecimiento económico del país contribuya al desarrollo social de su población. Las transformaciones socioeconómicas se dirigen así a conseguir que cada ciudadano apto para el trabajo tenga una ocupación que le aporte unos ingresos decorosos. A principios de los años 90, tras la caída del bloque socialista de Europa del este y el recrudecimiento del bloqueo de EEUU, el PIB experimentó un retroceso del 34,8% y el país vio ascender el desempleo hasta un 8,3%, en sólo cinco años. Sin embargo, esto no significó la pérdida de los servicios y los derechos sociales básicos que posee la población cubana, desde 1959, como la asistencia médica y la educación gratuitas y universales. A partir de la recuperación económica iniciada a fines de los noventa, la Isla orientó su política de empleo a disminuir la desocupación.

-¿En qué cifras se sitúa en la actualidad la tasa de paro de la Isla?

-En Cuba hay pleno empleo, según los indicadores fijados al respecto por los organismos internacionales. La Isla alcanzó la condición de pleno empleo en el año 2004, cuando se registró una tasa de paro del 2,3% , según los indicadores de organismos internacionales. Desde entonces, la situación ha mejorado, de hecho, Cuba cuenta hoy con una tasa de desempleo de sólo el 1,9%, una de las más bajas del mundo y, por eso, el Gobierno encamina ahora su gestión en este campo hacia el aumento de la calidad del empleo. Estas cifras, además, contrastan con el aumento del número de personas desempleadas que se registró en el mundo durante el pasado año, según los datos de la Organización Internacional del Trabajo. Para nosotros no resulta ético que en la Isla haya personas desempleadas y sin ocupación útil, por eso buscamos mantener la condición de pleno empleo, e incluso mejorar aún más ese índice. En la estrategia hay conceptos revolucionarios como el que considera que el estudio es empleo, por el cual miles de jóvenes reciben un salario por prepararse en carreras técnicas y universitarias.

-¿Cuáles son las principales características que podría señalar en la composición de la población activa de la Isla?

-En primer lugar, su alta cualificación. El 57,4% de la fuerza de trabajo en Cuba tiene estudios de enseñanza superior o media superior. Además, en el país, la fuerza técnica femenina supera el 67,3%. Por cada 100 trabajadores cubanos hay 2,3 ingenieros y por cada 100 técnicos hay 10,6 ingenieros. El país cuenta con más de 7.000 doctores en ciencias y cerca de 18.000 másters, en una población de poco más de once millones de habitantes. Igualmente miles de personas con discapacidad se incorporan al trabajo a través de programas de empleo especialmente dirigidos a ellos. Ese proyecto propicia la atención, formación y la inserción laboral de los discapacitados en correspondencia con sus necesidades y habilidades. En el país caribeño no sólo se garantiza el empleo de estas personas sino también su formación básica profesional para que puedan acceder a un oficio adecuado. Otra premisa es la ampliación de las posibilidades de empleo para la mujer. Un programa que ha incorporado gran número de mujeres al trabajo. La tasa de desempleo femenina es sólo del 2,2%.

Acceda a la versión completa del contenido