A fines de octubre, varias estructuras de valor patrimonial de la provincia de Santiago de Cuba (sureste) fueron afectadas por la fuerza de los vientos del huracán Melissa, que ocasionó destrozos en algunos lugares icónicos como el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, considerada la patrona de la isla.
Según explicó a la Agencia Sputnik el coordinador de la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador de Ciudades Patrimoniales de Cuba, Arsenio Sánchez, en Santiago de Cuba se registran actualmente las afectaciones de «mayor gravedad» a estructuras patrimoniales, luego del paso del huracán.
Además del centro histórico de la ciudad, en la provincia hay «paisajes excepcionales» que urge atender, como es el caso de El Cobre, un espacio de «mucho sincretismo» y gran simbolismo religioso, indicó el gestor patrimonial.
En ese lugar, apuntó, se articulan elementos de la industria minera, de la religión local –ahí está el Santuario Nacional de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre– y del «mundo del cimarronaje» (colectivos que escapaban de la esclavitud) en la etapa colonial.
El centro de veneración de la Virgen de la Caridad del Cobre, por ejemplo, erigida como la patrona de Cuba para los católicos, tiene más de 30 vitrales dañados debido a los fuertes vientos del Melissa.
También sufrieron afectaciones algunos elementos decorativos de mármol, el yeso de los techos y las estatuas de ángeles.
Para restaurar estos daños, se proyecta recurrir a las Escuelas Talleres (programas de formación sociolaboral del Gobierno) que existen en las diferentes provincias del país, como la de la capital, la de Matanzas (oeste) y la de Santiago de Cuba.
El poblado de El Cobre, localizado en las inmediaciones del Santuario, conoció igualmente el poder destructor de los vientos del huracán, que golpeó fuertemente las viviendas de la zona, cuyas características constructivas no son muy «muy resistentes», según observó Sánchez en conversación con la Agencia.
El Cobre tiene unos 7.000 habitantes y aún buena parte de ellos se encuentra sin servicio eléctrico, de acuerdo con reportes de la prensa local.
OTROS PAISAJES SANTIAGUEROS AFECTADOS
El Cementerio de Santa Ifigenia, donde descansan los restos mortales de grandes héroes cubanos, fue otros de los «paisajes» de valor patrimonial que padeció los embates del huracán en la ciudad de Santiago de Cuba.
De acuerdo con el coordinador Sánchez, se trata de otra de las obras de restauración que se va a emprender de «manera coordinada».
«Ya tenemos la práctica de que cada vez que ocurre un evento natural, que cada vez que hay algún tipo de afectación -tanto sísmica, de huracanes o cualquier situación extraordinaria que tengamos en las ciudades patrimoniales-, desde nuestra red articulamos todo el trabajo para poder apoyar las necesidades que existan», recalcó el gestor.
Aunque su oficina no siempre cuenta con todos los recursos necesarios, sí existe «una fuerza y un talento humano importante», pues muchos de los funcionarios son formados en las Escuelas Taller, agregó.
La Red tiene previsto realizar acciones en los centros históricos de las ciudades esteñas de Baracoa (provincia de Guantánamo), Bayamo (Granma) y Gibara (Holguín), y en el paisaje de los cafetales del este, si bien en ninguno de estos espacios reportaron «daños severos».
La idea es distribuir el trabajo entre cada una de las oficinas de la Red y que las soluciones ocurran en el menor tiempo posible; para ello, las diferentes Escuelas Talleres de las 15 ciudades patrimoniales tendrán que resolver con «recursos propios» los problemas detectados, puntualizó Sánchez.
Del mismo modo, señaló, es importante lograr otros recursos, pues se requieren determinados materiales que tienen alto costo y diferentes procedencias, no solo nacional.
En ese sentido, el especialista abogó por «articulaciones» con diferentes actores económicos, estatales y no estatales, y también por la cooperación internacional.
La idea es ir buscando «alianzas» que permitan emprender las restauraciones y los trabajos necesarios, y que de alguna manera se puedan alcanzar soluciones en el menor plazo posible, insistió.
Otra «misión» de gran importancia, destacó Sánchez, es «acompañar» a la población afectada por el huracán y brindarle apoyo en temas constructivos y humanos.
A finales de octubre, Melissa tocó tierra en un poblado del sur de la provincia de Santiago de Cuba y atravesó zonas montañosas y rurales como un huracán categoría 3 (de 5) en la escala de intensidad Saffir Simpson.
Según datos de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, en esa provincia las afectaciones de la vivienda son «particularmente complejas», con 95.000 casas afectadas, 2.300 derrumbes totales y 6.000 derrumbes totales de techo; a lo que se suman 6.900 familias que esperan soluciones habitacionales debido a otros eventos meteorológicos.



