Con mucho talento y carisma, Luisa María Jiménez es una de las actrices cubanas más populares desde que irrumpió en el panorama artístico hace más de tres décadas, y su presencia en televisión, cine teatro es garantía de calidad interpretativa y segura convocatoria de público. Con mucho talento y carisma, Luisa María Jiménez es una de las actrices cubanas más populares desde que irrumpió en el panorama artístico hace más de tres décadas, y su presencia en televisión, cine teatro es garantía de calidad interpretativa y segura convocatoria de público.
Graduada de la Escuela Nacional de Arte y posteriormente en el Instituto Superior de Arte, ha desempeñado significativos roles tanto en el teatro, como en la televisión y en el cine.
Asegura que descubrió a los ocho años que quería ser artista, pero esa inclinación la llevó primeramente a formarse como bailarina; luego descubrió la actuación y desde entonces no para de trabajar.
Sin embargo, fue Tojosa, su personaje en la telenovela ‘Sol de Batey’ hace 30 años, el que la hizo famosa entre todos los cubanos.
«La Tojosa, ya tiene casi treinta años, -recuerda- es un icono popular que ha llegado hasta nuestro tiempo, ha pasado a mi familia y lo ha heredado mi hija, a quien llaman La Tojosita. ¿A cuanta gente le pasa eso en el mundo?, que las recuerden como a uno de sus personajes, a pocas. Hay actores que tiene las caras de sus roles todas la vida, hay otros que no. Me pasó a mí con la Tojosa por lo que soy muy feliz».
Recientemente, la salud de la actriz mantuvo en vilo a sus fans, pero para tranquilidad de todos afirma que «la recuperación fue asombrosa, de dos derrames cerebrales, me recuperé en menos de un mes y no me quedaron secuelas. Tenía una aneurisma congénita, probablemente desde que nací, es algo que uno no sabe que existe y se va desarrollando lentamente, por algún evento o motivo específico ocurre la explosión”.
“Me siento muy honrada y feliz por las manifestaciones de cariño y preocupación que tuve de todo mi pueblo, la gente que me quiere y admira me fue a ver al hospital, muchos rezaron por mi recuperación por lo que estoy muy emocionada y agradecida. Ese afecto me ayudó a recuperarme pronto”.
Con sus 50 años, próximamente el Festival Internacional de Cine Pobre, le rendirá homenaje, pues al decir de Lester Hamlet, director del evento, “Luisa es una de las últimas actrices que entró al mundo de Humberto Solás (creador del festival) y lo hizo con la suficiente fuerza como para quedarse y ser recordada por siempre”. Se siente “privilegiada”.
“No lo esperaba, te soy sincera ya no espero, vivo dejándome llevar por lo que va saliendo, lo que el día me va dando, porque sin esperar nada se sufre menos. Fue una sorpresa tremenda este homenaje, sobre todo porque ha llegado en un momento de mi vida tan particular. Estoy muy emocionada al saber que me tienen presente, me consideran y admiran mi carrera, eso es siempre motivo de alegría”.
Después de muchos comentarios y especulaciones del público y la prensa, la Federación Cubana de Béisbol confirmó la ratificación de una sanción impuesta al lanzador del equipo de Villa Clara, Freddy Asiel Álvarez, quien fue inhabilitado por el resto de la presente temporada, incluidos los partidos de la postemporada.
Asiel es considerado una de las figuras estelares del béisbol en el país y su ausencia presupone un duro golpe a las aspiraciones de retener la corona de los vigentes monarcas nacionales.
Ya en la edición precedente del clásico doméstico se había erigido como el principal pilar en el título de los Naranjas villaclareños, con cinco victorias en igual número de presentaciones en las rondas semifinal y final.
Ahora muchos comentan que su futuro pende de un hilo mientras que el joven ha hecho silencio.
Previamente hubo un dilatado proceso para notificarle al jugador la sanción inicial y más dilatada aun pareció ser la posterior reclamación del atleta, pero de nada le valió pedirle perdón a las once mil vírgenes pues las autoridades deportivas encargadas del caso decidieron mantener la medida punitiva por los lamentables hechos acontecidos el 17 de febrero último en el estadio Victoria de Girón, de la occidental provincia de Matanzas.
En Cuba el béisbol o la pelota, como prefieren llamarla, al igual que el fútbol en otras partes del planeta, mueve multitudes y exacerba las pasiones, pero últimamente las broncas entre equipos o entre sus partidarios son cada vez más frecuentes y han encendido las alarmas de las autoridades, la prensa y el público.
