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Julio PALACIOS Presidente del Parlamento Centroamericano

Con permiso... Tres preguntas

En declaraciones a la agencia Prensa Latina, el presidente del Parlamento Centroamericano (Parlacen), Julio Palacios, asegura que su visita oficial a Cuba ha sido muy fructífera y que ha abierto sin lugar a dudas una amplia gama de posibilidades de colaboración entre la institución que preside y la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba. Una cooperación que Palacios querría extender a otros campos como la educación, la salud o la detección de los desastres naturales en los que cree que la región podría beneficiarse del intercambio de experiencias y avanzar hacia la integración. En declaraciones a la agencia Prensa Latina, el presidente del Parlamento Centroamericano (Parlacen), Julio Palacios, asegura que su visita oficial a Cuba ha sido muy fructífera y que ha abierto sin lugar a dudas una amplia gama de posibilidades de colaboración entre la institución que preside y la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba. Una cooperación que Palacios querría extender a otros campos como la educación, la salud o la detección de los desastres naturales en los que cree que la región podría beneficiarse del intercambio de experiencias y avanzar hacia la integración.

-¿Cuál es su valoración de los trabajos realizados durante su reciente visita oficial a Cuba?

-Considero muy fructíferos los resultados de esta visita. Ha servido para que los parlamentos centroamericano (PARLACEN) y cubano avanzaran en consolidar la cooperación y contribuir al fortalecimiento de las relaciones entre los pueblos de la región. Un factor decisivo para la integración. De momento, ambas instancias han suscrito un acuerdo por el que se establece un mecanismo de cooperación en materia de prevención de desastres naturales. El objetivo, en este caso, es contribuir al logro de un sistema favorecedor de la eliminación de los riesgos y calamidades derivados de estas eventualidades, para lo que resultaría muy positivo el intercambio de experiencias. En estos días, tuve la posibilidad de asistir a una amplia exposición de los especialistas cubanos en meteorología y protección civil, dos temas que considero de vital importancia para Centroamérica. Año tras año esta zona es objeto de huracanes y tormentas tropicales, que arrasan dejando una gran mortandad de personas y para resolverlo, vamos a apoyarnos en la experiencia que tiene Cuba en este aspecto.

-¿Qué temas ha abordado con los representantes del Parlamento cubano en sus encuentros bilaterales?

-Hemos abordado directamente temas importantes como la necesidad de estrechar los lazos interparlamentarios en la región y conseguir que el PARLACEN sirva de plataforma para los intercambios culturales y académicos. Mediante esta variante podríamos conceder becas a través de la entidad que presido a diversos sectores de la sociedad centroamericana. Eso daría más contenido a una institución como la nuestra que surge por factores internos de Centroamérica tales como, la necesidad de construir una nueva visión y modelo integracionista en la región y construir mecanismos de mayor cooperación y solidaridad entre los Estados y pueblos del istmo respetando la soberanía y diversidad cultural. Y diría que aún me siento más comprometido con el proyecto de cooperación parlamentaria tras haber visitado centros como la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) y haber conocido, de primera mano, las características y métodos de trabajo de la institución. Espero poder difundir la obra que se realiza allí y convertirme en defensor de oficio de un trabajo tan loable.

-¿En qué sectores considera que la ciencia y la tecnología de la Isla han alcanzado un desarrollo más reseñable?

-Hay varios, pero estoy sumamente complacido de ver cómo evoluciona el desarrollo de la ingeniería genética en Cuba y de su incidencia en los niveles de salud de la Isla. De hecho, a mí y a todo la delegación que me acompaña nos ha llamado la atención sobremanera el avance concreto y real que han alcanzado los científicos cubanos en esta dirección y estamos muy motivados para promover en Centroamérica los productos biotecnológicos cubanos. Creo que es necesario que exista un futuro intercambio entre Cuba y los países de la subregión en este campo, porque la prioridad de mantener la salud de los centroamericanos debe estar por encima de la mala influencia de los excesos burocráticos e incluso de las posibles diferencias políticas. Yo estoy convencido de que los centros biotecnológicos cubanos tienen fines pacíficos y creo que las declaraciones que han hecho algunos funcionarios estadounidenses sobre el peligro para la paz de estas instituciones no tienen base. Me consta que el sector científico cubano está enfocado en salvaguardar la salud de su pueblo.

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