El béisbol está en baja, es el criterio generalizado en ‘Radio Bemba’, donde muchos achacan la caída en la popularidad del deporte nacional a innumerables factores, desde la sangría de jugadores estelares hacia las Grandes Ligas de Estados Unidos, hasta lo que conocedores consideran como una excesiva cantidad de equipos participantes en la serie, e incluso a falta de organización en las competencias. El béisbol está en baja, es el criterio generalizado en ‘Radio Bemba’, donde muchos achacan la caída en la popularidad del deporte nacional a innumerables factores, desde la sangría de jugadores estelares hacia las Grandes Ligas de Estados Unidos, hasta lo que conocedores consideran como una excesiva cantidad de equipos participantes en la serie, e incluso a falta de organización en las competencias.
El caso es que la crisis se refleja en la bajísima asistencia a los estadios, donde la aparatosa presencia de miles de aficionados es un recuerdo que ha dado paso a graderías prácticamente vacías, que solo se llenan, en parte, cuando se acercan las finales.
La cosa ha llegado a tal punto que algunos narradores deportivos llaman sin medias tintas a los seguidores de los equipos a acudir a los estadios porque -aseguran- la presencia de los espectadores es “lo que estimula a los jugadores a brindar un espectáculo como el público se merece”.
Y las perspectivas no son buenas, afirman algunos, porque, sobre todo los jóvenes, se están inclinando cada vez más hacia el fútbol, aunque en la isla todavía es de muy baja calidad, pero tienen el aliciente, en cambio, de poder ver por televisión prácticamente todos los partidos, muchos incluso en directo, del mejor fútbol europeo.
