Su nombre es extremadamente largo y seguro con el tiempo los huéspedes lo irán acortando, pero ahora es El Palacio Marqués de San Felipe y Santiago de Bejucal, un hotel del centro histórico de La Habana, que abrirá sus puertas en noviembre próximo con 27 habitaciones. Su nombre es extremadamente largo y seguro con el tiempo los huéspedes lo irán acortando, pero ahora es El Palacio Marqués de San Felipe y Santiago de Bejucal, un hotel del centro histórico de La Habana, que abrirá sus puertas en noviembre próximo con 27 habitaciones.
La Oficina del Historiador de la Ciudad, que lleva a cabo un plan para recuperar para el turismo las más importantes construcciones de la etapa colonial, incluidos los palacios de las familias más adineradas de la época, informó que el nuevo hotel será administrado por la compañía turística Habaguanex.
El hotel ha sido descrito por Orlando Castellanos, jefe de la obra, como una atractiva edificación con elementos distintivos como la singular lámpara que ilumina el lobby, el bar del patio interior, donde se destaca la cristalería y la estatuilla del dios Neptuno que se erige como símbolo del recinto.
El inmueble está en la bifurcación de las calles Oficios y Amargura y frente a la Plaza de San Francisco de Asís. Tres de sus habitaciones son suites, en las que se combina la historia del edificio y de su entorno con modernas tecnologías instaladas y otros requerimientos necesarios para los viajeros de estos tiempos y que igualmente añaden atributos para la mejor estancia de los futuros huéspedes.
Tiene una decoración interior de corte minimalista que contrasta con la ornamentación barroca de su portada, agregó Castellanos.
El edificio fue propiedad de Don Sebastián de Peñalver a finales de siglo XVII, y de los sucesores del IV marqués de San Felipe y Santiago, a principios de la siguiente centuria. La gerencia dijo sobre el hotel de cuatro estrellas que es propio para «Romances y Lunas de miel».
