Suprimen venta de cigarros por la libreta

El debate sobre la eliminación de la histórica cartilla de racionamiento (la libreta, como simplemente dicen los cubanos) se mantiene en la calle, y entre las especulaciones unos abogan porque acaben de quitarla pues los productos subsidiados que aporta solo alcanzan para dos semanas, mientras que otros ven con preocupación su posible desaparición, pues aunque sea magro su aporte, comprar todos los alimentos y útiles de aseo en el mercado «libre» va mucho más allá de la capacidad del bolsillo medio. El debate sobre la eliminación de la histórica cartilla de racionamiento (la libreta, como simplemente dicen los cubanos) se mantiene en la calle, y entre las especulaciones unos abogan porque acaben de quitarla pues los productos subsidiados que aporta solo alcanzan para dos semanas, mientras que otros ven con preocupación su posible desaparición, pues aunque sea magro su aporte, comprar todos los alimentos y útiles de aseo en el mercado «libre» va mucho más allá de la capacidad del bolsillo medio. Pero aunque no lo parezca, casi nadie recordaba que un artículo tan innecesario como los cigarrillos también se vendía por la libreta (para fumadores o no) y por ahí las autoridades le «acortaron» otro pedacito al llevado y traído documento. Y aunque eran solo dos paquetes de tabaco negro y uno de rubio por adulto, es fácil sacar la cuenta de los millones de paquetes que se vendían a menos de la mitad del precio de los que se expenden «liberados», lo cual será una carga menos para la administración y más dinero para el erario. Los enemigos del hábito de fumar están de plácemes y los fumadores deberán dejar el mal hábito o deberán disponer de un poco más de plata para sostener el vicio.