Ya ha terminado el Festival de Rotilla, considerado por los cubanos como la gran fiesta “rave” de la Isla. Ya ha terminado el Festival de Rotilla, considerado por los cubanos como la gran fiesta “rave” de la Isla. En total han sido 72 horas de música ininterrumpida, de la que han podido disfrutar este año unas 15.000 personas, 5.000 más que en la edición anterior.
El festival que se celebra todos los años durante el verano en la Playa Jibacoa, situada a unos 57 kilómetros al este del centro de La Habana, ha contado con decenas de tiendas de campaña, escenarios situados junto al mar en donde han podido tocar distintas bandas y Djs, servicios de tatuajes al momento y ron cubano.
El evento, que es gratuito, fue en sus inicios una fiesta entre amigos que querían bailar fuera de la ciudad. Debido al éxito que fue acumulando el festival (nacido en 1998) y a la afluencia de gente, el encuentro cultural tuvo que ser trasladado de la pequeña playa Rotilla, donde inicialmente se celebraba, a Jibacoa.
Uno de los grandes atractivos de esta edición ha sido, según los asistentes, la actuación de “Aldeanos”, un dúo de música “underground” que ha desatado la polémica en el país debido a su irreverencia y sus críticas sociales.
El festival ha tenido sus detractores, ya que algunos vecinos de la zona, consideran que esta “rave” sólo produce suciedad en las playas, además de ser un encuentro que es exclusivo para hippies y rockeros que no son bien vistos en Cuba.
