Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

El Gobierno y la Iglesia cubana, cada vez en mejor sintonía

BUENA PRUEBA de este deseo de no incomodar al poder político de la Isla sería, no sólo el talante actual de Jaime Ortega, un antiguo rival de Fidel Castro al que criticó en muchas ocasiones, también los nombramientos de nuevos jerarcas eclesiásticos que se han producido en los últimos años. BUENA PRUEBA de este deseo de no incomodar al poder político de la Isla sería, no sólo el talante actual de Jaime Ortega, un antiguo rival de Fidel Castro al que criticó en muchas ocasiones, también los nombramientos de nuevos jerarcas eclesiásticos que se han producido en los últimos años. Por ejemplo, la sustitución del Arzobispo de Santiago de Cuba, Pedro Meurice Estiú, que se trasladó a Miami por problemas de salud poco antes de morir en 2007. Meurice desató las iras de la nomenclatura cubana al presentar a Juan Pablo II en 1998 antes de la misa que iba a dar en la Plaza de la Revolución con un discurso abiertamente crítico contra el régimen. Su sustituto monseñor Dionisio García Ibáñez, que también preside la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC), no hará lo mismo cuando presente a Benedicto XVI.

Más información

Scroll al inicio