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El robo de combustible bate récords

Radio Bemba

Manguera dispensadora de combustible

En Cuba, los carros particulares conocidos como almendrones, que se dedican al transporte de pasajeros, no gastan ni medio litro de combustible en una jornada de trabajo, según conocieron recientemente, asombrados, los diputados en una sesión de la comisión de asunto económicos del parlamento.

En Cuba, los carros particulares conocidos como almendrones, que se dedican al transporte de pasajeros, no gastan ni medio litro de combustible en una jornada de trabajo, según conocieron recientemente, asombrados, los diputados en una sesión de la comisión de asunto económicos del parlamento.

Datos oficiales reflejan que las gasolineras de Cupet despacharon a esos vehículos solo 0,48 litros diarios como promedio en toda la isla hasta abril, lo cual evidencia que el robo de combustible en las empresas del Estado es al por mayor a pesar de los constantes recortes a las asignaciones que reciben las entidades.

En Radio Bemba la cuenta es fácil: hay muchos «desde choferes hasta directivos de las empresas- que están cogiendo una enorme tajada vendiéndole a los particulares la gasolina que reciben gratis, a un precio, por supuesto, más bajo que lo que cuesta el litro en las gasolineras.

Y como muchos advierten, la solución no está en suspender a los choferes privados, lo que empeoraría la precaria situación del transporte en el país, sino «cortar cabezas» en organismos y empresas, controlando al detalle el uso del combustible, pues solo cuando el suministro ilegal cese, los taxistas tendrán que ir al Cupet a comprar el combustible.

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