Nadie podía imaginar hace tan sólo unos meses el giro que ha tomado la comunidad internacional respecto a Cuba. El capitalismo vuelve a contar con la Isla, o al menos así se ha desprendido de la última reunión de Davos, en la que el Foro invitó a su sesión sobre América Latina de abril en Río de Janeiro al gobernante cubano Raúl Castro. EL CAPITALISMO LLAMA A LA PUERTA DE CUBA
Nadie podía imaginar hace tan sólo unos meses el giro que ha tomado la comunidad internacional respecto a Cuba. El capitalismo vuelve a contar con la Isla, o al menos así se ha desprendido de la última reunión de Davos, en la que el Foro invitó a su sesión sobre América Latina de abril en Río de Janeiro al gobernante cubano Raúl Castro. Tal vez la petición sólo responda a un efecto más de la crisis. Es decir, la elite financiera, empresarial y política del mundo podría haber visto en Cuba un lugar con un futuro muy prometedor en los negocios, especialmente en el sector de los hidrocarburos. Habrá que esperar para conocer la respuesta del menor de los Castro a esta invitación, pero con ella ya se ha abierto una nueva puerta para que la Isla participe también en la Cumbre de las Américas programada para el próximo mes de abril. Esta será la primera cita del nuevo presidente estadounidense, Barack Obama, con sus homólogos latinoamericanos, y la mayor de las Antillas podría volver a contar con un sillón en la mesa casi cinco décadas después. La mayor parte de los expertos descarta que se pueda producir un incidente entre EEUU y Cuba, como el ocurrido durante la reunión de Naciones Unidas en Monterrey (México), ya que las reuniones son de carácter distinto.
DIÁLOGO CON LA HABANA
La República Checa ha instado a sus socios de la Unión Europea a mantener una postura unida frente a La Habana. El país preside actualmente el organismo de los Veintisiete y nunca ha sido precisamente un gran defensor de la política de la Isla, ni tampoco del fin de las restricciones hacia ella. De hecho, pusieron muchos reparos cuando en junio del pasado año, la Unión Europea decidió levantar las sanciones impuestas desde 2003 e iniciar un diálogo político con las autoridades del país caribeño. Precisamente, esta decisión será revisada el próximo mes de junio, fecha que coincide con el fin de la presidencia de la República Checa. Ellos han reconocido que las negociaciones serán muy complicadas con la Isla, ya que saben que dentro del Viejo Continente hay posiciones diferentes respecto al levantamiento de las sanciones. Sin embargo, la voluntad de diálogo está presente entre todos los países miembros, y a los checos no les ha quedado otro remedio que reconocer el lado positivo de la polémica: Cuba también parece dispuesta al diálogo, aunque sólo sea a eso. En realidad, ya ha rechazado el llamado de Occidente para que libere a los presos políticos que se oponen al sistema comunista, asegurando al Consejo de Derechos Humanos de la ONU que esa demanda viola sus derechos soberanos.
