El estado cubano se ha convertido en el cuarto país de América Latina con más lugares condecorados como Patrimonio de Humanidad, un título otorgado por la organización internacional de Naciones Unidas (ONU). El estado cubano se ha convertido en el cuarto país de América Latina con más lugares condecorados como Patrimonio de Humanidad, un título otorgado por la organización internacional de Naciones Unidas (ONU). Además, la Isla se encuentra en la posición vigésimo entre los 188 países que a escala mundial poseen este tipo de patrimonio.
Esta ubicación se debe a que la mayor de las Antillas cuenta con 20 lugares protegidos por la ONU. Algunos de estos emplazamientos son el Castillo San Pedro de la Roca del Morro, edificación que se encuentra en Santiago de Cuba o el Valle de Viñales en la región cubana de Pinar del Río, consideradas Patrimonio de la Humanidad en 1997 y 1999 respectivamente. El último espacio que ha conseguido esta condecoración ha sido el centro histórico de la ciudad de Camagüey en el 2008.
Durante las V Conferencias sobre El Patrimonio Cultural de los pueblos iberoamericanos celebradas en la Isla, el vicepresidente del Consejo Nacional de Patrimonio, Nilson Acosta, ha declarado que Cuba protege y conserva sus bienes al considerarlos irremplazables para conservar la memoria histórica.
Cuba forma parte de la Convención del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural desde 1981. Un año después el centro histórico de La Habana Vieja entró a formar parte de los bienes protegidos por la organización internacional.
