«Solo en el período de abril a diciembre de 2020 hemos tenido afectaciones de más de 330 millones de dólares en el sector de la agricultura, de ellos 194 millones por concepto de ingresos dejados de recibir por exportaciones», subrayó Céspedes en un encuentro con la prensa.
La funcionaria se refirió al impacto negativo en la producción de alimentos en la isla a partir del recrudecimiento de las sanciones de Washington, principalmente en los últimos cuatro años, tiempo en que la administración del expresidente Donald Trump (2017-2021) aplicó más de 240 sanciones contra la economía cubana.
Entre estas medidas, Céspedes subrayó la autorización de demandas judiciales en virtud de la aplicación del título III de la Ley Helms-Burton, y la imposibilidad de adquirir insumos destinados a la producción agropecuaria que tienen más del 10 por ciento de sus componentes producidos por empresas estadounidenses.
También impactaron seriamente las limitaciones para exportaciones de productos cubanos, entre ellos el ron y el tabaco, de alta demanda internacional, la persecución financiera contra bancos y compañías extranjeras que comercian con Cuba, y las sanciones contra buques, navieras y aseguradoras que entorpecen el buen funcionamiento del comercio internacional.