«A nivel de Gobierno, como política, hemos establecido priorizar el sector residencial. Hemos estado paralizando actividades económicas para garantizar la generación energética a la población», subrayó Marrero, en una intervención transmitida en cadena nacional por radio y televisión.
Durante su intervención, el jefe de Gobierno de la isla compartió el espacio con el director general de la Unión Eléctrica, Alfredo López, y el director general de Cuba-Petróleo (Cupet), Edrey Rocha, ambos funcionarios del Ministerio de Energía y Minas, quienes actualizaron de la difícil situación por la que atraviesa el país.
Marrero reconoció que las principales causas de la actual crisis son la falta de combustible, el estado de la infraestructura de las instalaciones generadoras de electricidad y el incremento de la demanda.
Destacó además que fue aprobado un programa para enfrentar la situación del sistema eléctrico, que contempla la progresiva recuperación de las termoeléctricas y los emplazamientos, el incremento de la producción de crudo nacional y el uso de las fuentes renovables de energía.
Agregó que, como parte de las medidas adoptadas, se decidió proteger el sector residencial con la distribución de electricidad, y en el sector estatal sólo funcionarán los centros indispensables, por lo que establece la desconexión general de centros de trabajos que no son vitales a la economía, así como incrementar el teletrabajo y tomar acciones sobre los altos consumidores y evaluar planes de consumo en el sector empresarial privado.
