Con un mes de mayo que pasó con pocas lluvias y un ambiente cargado que multiplica el calor, muchos habaneros andan como locos de shoping en shoping buscando ventiladores. Con un mes de mayo que pasó con pocas lluvias y un ambiente cargado que multiplica el calor, muchos habaneros andan como locos de shoping en shoping buscando ventiladores.
Los comentarios en Radio bemba acuñan que se puede ir lo mismo a Galerías Paseo, a Cerro y Boyeros, La Puntilla o cualquier otro centro comercial grande, que a las tienditas de barrio y el panorama es el mismo, no hay ventiladores y, si acaso, algunos aires acondicionados con precios que no están al alcance de la mayoría.
A la pregunta frecuente de cuándo van a sacar el producto, los empleados, la mayoría acostumbrados a la abulia, solo se encogen de hombros, y los potenciales compradores se quedan con las dudas de si hay existencias en los almacenes o tienen que esperar “a que el barco de ventiladores llegue de China”.
Unos recuerdan que casi todos los años ocurre lo mismo en cuanto se aproxima el verano, y que al parecer las cadenas de tiendas no escarmientan y “olvidan” prepararse adecuadamente para responder con oportunidad a la demanda, y cuando todos vienen a ver, los ventiladores aparecen en abundancia a finales de septiembre, cuando ya la preocupación es comprar algún abrigo para el ligero invierno cubano.
