El problema de la doble circulación monetaria en Cuba y la eliminación del peso convertible (CUC) ha vuelto a surgir en algunos corrillos de La Habana, en los cuales se dice que “antes de fin de año viene el cambio de la moneda”. El problema de la doble circulación monetaria en Cuba y la eliminación del peso convertible (CUC) ha vuelto a surgir en algunos corrillos de La Habana, en los cuales se dice que “antes de fin de año viene el cambio de la moneda”.
Ante tales comentarios, no son pocos los que alegan que “cuando lo vea lo creo” porque tantas veces se ha especulado en la calle sobre la inminencia de ese paso que ya muchos ni siquiera se preocupan de si afectará o no sus bolsillos.
Para ello se basan en las garantías reiteradas por las autoridades de que cuando ello suceda, se mantendrán intactas las cuentas bancarias y no habrá una devaluación en el cambio actual del CUC con respecto al peso cubano (CUP) de 24×1.
Otros, por su parte, consideran “sospechoso” el silencio gubernamental, cuando la eliminación de la dualidad monetaria es considerada un paso fundamental dentro de las reformas, tal como se planteó en el sexto congreso del Partido Comunista, y lo reiteraron en el séptimo, celebrado a principios de este año.
Dicen al respecto que “cuando hay tanto silencio es porque la cosa se está cocinando”, y alegan que “no sería la primera vez que las cosas más importantes se hacen en el mayor de los secretos, para no dejar ni un cabo suelto”.
