Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

EL SARATOGA ESTÁ DE MODA

Radio Bemba

A veces la propaganda involuntaria resulta más efectiva que un ingenioso comercial que se pase las 24 horas del día por la televisión. A veces la propaganda involuntaria resulta más efectiva que un ingenioso comercial que se pase las 24 horas del día por la televisión.

Y eso parece haber ocurrido con la visita de Beyoncé a La Habana y su hospedaje en el hotel Saratoga, porque ahora el establecimiento ha pasado a los primeros planos de la popularidad.

Algunos, cuando se enteraron que la artista había dormido tres noches allí, preguntaban «Y ese hotel dónde queda» y se quedaban pensativos, revisando su directorio mental cuando alguien les decía simplemente que «frente al Capito­lio». Pero ahora todos los ojos parecen estar puestos en ese lugar porque «si Beyoncé estuvo allí, con los millones que tiene, por algo será». Y la medida exacta de esa popularidad la dio Yanelis, una linda muchachita que quería tomarse las inolvidables fotos de sus 15 en los jardines del Hotel Nacional, y de buenas a primeras hizo cambiar de itinerario al fotógrafo y a toda su parentela cuando les dijo que «de eso nada. ¡Yo quiero las fotos en el Saratoga!» Y como los antojos de una quinceañera son ley, pues allá va eso, y fotos van y fotos vienen, en el vestíbulo, realmente elegante, donde se combinan con éxito muebles antiguos con pinturas modernas; y más fotos en la piscina del último piso, con su espléndida vista del paseo del Prado y el Capitolio; y también en uno de los bares, del entrepiso, situado bajo un tragaluz, entre butacas de estilo neoclásico y palmeras. Jardines como en el Nacional no hay, porque el Saratoga está enclavado en una zona que es asfalto puro y en un entorno lamentable, como un oasis en el desierto, circundado por edificios ruinosos que hacen aún más contrastantes los brillos de sus bronces y cristales. Hace muchos años aquello eran «Los aires libres» con terrazas llenas de mesas donde se sentaban a beber los ricos de la ciudad para escuchar a Anacaona y otras orquestas famosas. Pero de aquello solo queda el recuerdo, aunque el día menos pensado puede que Eusebio, el Historiador de la Ciudad, reviva aquellos ambientes. Por suerte, la niña no se antojó de que alquilaran una habitación para tomarse allí algunas fotos dignas de Play Boy, no vestida de princesita sino escasita de ropa, como algunas acostumbran, pues el Saratoga a estas alturas pasa por ser no solo uno de los hoteles más lujosos de La Habana, sino también de los más caros, con precios que rondan los 200.00 CUC la noche. La niña, por suerte, se dio cuenta a tiempo que ella no era Beyoncé.

Más información

Scroll al inicio