Según algunos, “todo el mundo quiere irse de Cuba”, aunque encuestas académicas indican que entre los jóvenes, los más propensos a dar ese paso, no llegan al 20% quienes ven su futuro en otro país, que casi siempre no es otro que Estados Unidos. Pero sea lo que sea, el tema está en boca de muchos de forma permanente. Según algunos, “todo el mundo quiere irse de Cuba”, aunque encuestas académicas indican que entre los jóvenes, los más propensos a dar ese paso, no llegan al 20% quienes ven su futuro en otro país, que casi siempre no es otro que Estados Unidos. Pero sea lo que sea, el tema está en boca de muchos de forma permanente.
A nivel de radio bemba se ha vuelto casi una letanía hablar del último jugador de beisbol que dio el salto en busca de un contrato millonario en las Grandes Ligas, pero en el barrio y la cuadra, al asunto cobra ribetes más íntimos cuando se corre el chisme de que “fulanito está desaparecido”.
Porque lo mismo “desaparecen” quienes abordan temerariamente una precaria embarcación para cruzar el estrecho de la Florida, que quienes optan por vías aparentemente más seguras como viajar a México, o más lejos aún, volando hasta Ecuador para atravesar Colombia y remontar América Central hasta llegar “a la yuma”.
Pero si antes la ida era sin retorno, cada vez son más quienes dejan “la retaguardia segura” para volver si las cosas no salen bien en el Norte, o lo más llamativo, los que muchos años después de marcharse comienzan a retornar porque “aquello” no era lo que pensaban o animados por las posibilidades de mejorar que se van abriendo en la isla.
