Las aparentes ganancias de los militares serían la pérdida de los hombres de Felipe Pérez Roque, miembro del «consejo de regencia» con muy escaso protagonismo durante los dos últimos meses. Las aparentes ganancias de los militares serían la pérdida de los hombres de Felipe Pérez Roque, miembro del «consejo de regencia» con muy escaso protagonismo durante los dos últimos meses.
Antes de la retirada temporal de Fidel, se llevó a cabo una reestructuración del partido que parecía consolidar definitivamente el ascenso de los Talibanes del Trópico, cuya irrupción tuvo lugar en mayo de 1999, cuando el actual canciller sustituyó en el cargo a Roberto Robaina. Este ascenso en las quinielas sobre los posibles sucesores de Fidel que se elaboran periódicamente se produciría sólo dos años después, en junio de 2001.
En ese mes, Fidel sufrió un desvanecimiento cuando pronunciaba un discurso ante 60.000 personas en el municipio habanero de Cotorro y fue Felipe quien dio el paso al frente y tranquilizó al público tras el incidente, mientras que otros líderes más conocidos decidían quedarse atrás.
