TRAS UNOS AÑOS con algunos problemas registrados en las divisas de alimentos, actualmente se ha recobrado el ritmo habitual de entrega y suministro, e incluso algunos observadores aventuran que el servicio ha mejorado. TRAS UNOS AÑOS con algunos problemas registrados en las divisas de alimentos, actualmente se ha recobrado el ritmo habitual de entrega y suministro, e incluso algunos observadores aventuran que el servicio ha mejorado. Este “milagro” parece haberse producido gracias a los contingentes que llegan desde China. El país asiático suministra sobre todo productos enlatados a la mayor de las Antillas, y en los supermecados de la Isla empiezan a predominar los alimentos de origen chino. Sin embargo, a diferencia de lo que ocurría hace un par de años, hay una menor oferta de alimentos llegados de EEUU. Esta situación se debe posiblemente a la presión que la Administración Bush ha hecho sobre Cuba en este aspecto, obligando a la Isla a pagar los alimentos al salir de EEUU, cuando los pactos internacionales estipulan que en este tipo de negocios e intercambios comerciales, la mercancía debe ser pagada por el país al llegar a su destino.