LA IMPRESIONANTE marina lleva dos años en obras que se sitúan al final de la península de Icacos. LA IMPRESIONANTE marina lleva dos años en obras que se sitúan al final de la península de Icacos. En los últimos meses, los trabajos de construcción se están acelerando. Tres turnos cubren las 24 horas para que la instalación esté disponible lo antes posible.
Entre la población de la zona se atribuye este incremento en el ritmo al esfuerzo de los militares. Seguramente creen esto porque gran parte de los operarios de la construcción tienen un aspecto parecido a los reclutas de reemplazo.
A pesar de la incesante actividad, la única parte de la marina que está acabada es un restaurante para 300 comensales. El restaurante es un local regentado por un antiguo jefe de la marina de Varadero amigo de Fidel Castro. Los precios del negocio están adaptados para el turismo, con elevados precios para la población local.
