El Gobierno de Cuba ha anunciado que generalizará una serie de medidas para frenar la subida de las tarifas de los alimentos agrícolas entre las que destaca especialmente el control de precios. El Gobierno de Cuba ha anunciado que generalizará las medidas para frenar la subida de las tarifas de los alimentos agrícolas. Entre estas destaca especialmente el control de precios que no dejado de incrementarse por causas como el mal clima o, como marcan las leyes del mercado, el incremento de la demanda.
La medida se esperaba tras el experimento comenzado a principios de este mes en la provincia de Artemisa con la venta de productos agropecuarios a «un valor máximo fijado» por el Consejo de la Administración Provincial. En este contexto, se ha ordenado a los camiones privados que descarguen sus productos en los mercados mayoristas en lugar de hacerlo en los puntos de venta habituales.
Es decir, tras las reformas pro mercado impulsadas por el presidente cubano, Raúl Castro, el mismo ejecutivo cubano ha apostado por hacerse cargo de comprar, distribuir y vender los alimentos a precios fijos. Una medida que el Cuba Standard define con cierto gracejo como la política agrícola de «un paso adelante y ¿un paso atrás?».
En realidad, el Gobierno cubano ha fiajdo precios máximos en algunos productos y en determinados mercados para obligar a los ‘privados’ a bajar los precios sino quieren perder mercancía. Una señal de que si bien el Gobierno está dispuesto a hacer ciertas concesiones a ‘los emprendedores’ no está dispuesto a renunciar a tener las riendas sobre la economía y sus sectores.
Más aún después de que el Sindicato Nacional de Trabajadores Agropecuarios y Forestales intentase marcar terreno publicando un informe en el que defendía la eliminación total de los controles de precios argumentado precisamente que es así como se «contribuye en la disminución de los precios».
Como parte de esta estrategia, la televisión cubana ha acompañado la entrada en vigor de los nuevos precios ‘controlados’ con informaciones que señalan a los intermediarios como los principales responsables de la subida que han experimentado los productos.
Una soterrada pelea entre el Estado y los vendedores privados que estos no podrán mantener teniendo que afrontar bajadas como la de la guayaba cuya libra ha pasado de venderse a 20 pesos convertibles a finales del año pasado a hacerlo ahora a 2,80, según informa el digital 14 y medio.
