El pasado 22 de abril, el Departamento de Estado de EE.UU. anunció que permitía la importación de café y de productos textiles producidos por «empresarios independientes» cubanos. El pasado 22 de abril, el Departamento de Estado de EE.UU. anunció que permitía la importación de café y de productos textiles producidos por empresarios cubanos «que demostraran su independencia del Estado». Una medida, en realidad, con un impacto muy limitado, pero con la que el Gobierno de Barack Obama buscaba alentar una clase media en la Isla.
Un intento que ha recibido hoy su respuesta desde las páginas del diario oficial Granma. Así, la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) cubana ha publicado un artículo criticando la medida al señalar que EE.UU. «hace prácticamente imposible la importación en ese país» de productos cubanos señalando, una vez más, como causa fundamental al «bloqueo».
Así, segun señala la ANAP, «por el hecho de haber desprovisto unilateralmente a Cuba —después de decretado el bloqueo— del tratamiento de nación más favorecida», que, según indican, le correspondería al país caribeño «como Estado Fundador de la OMC«, las exportaciones se convierte en inviables. Y es que «cualquier producto cubano que entre en EE.UU. tiene que pagar las tarifas más elevedas», apuntan.
Además, la ANAP señala que «nadie puede pensar que un pequeño productor agrícola puede exportar directamente a los EE.UU.», lo que haría necesario, según su criterio, que participasen en «empresas cubanas de comercio exterior» y «transacciones financieras en dólares, que hasta ahora no se han podido concretar». Es decir, una nueva referencia a los impedimientos que aún siguen en vigor.
Por ello, la asociación de agricultores, pide al Gobierno de Barack Obama que levante el embargo al que define como «el principal obstáculo al desarrollo de Cuba». Una señal de la disconformidad de las autoridades cubanas con esa ampliación de la normativa creada en febrero de 2015 para burlar el embargo y permitir la importación de bienes producidos por empresarios cubanos.
Ya entonces, se había autorizado la importación de perfúmenes, jabones, velas, productos fotográficos o cinematográficos, artículos de plástico, de cuero o de madera; libros y papel, seda, algodón, algunos textiles, calzado, cerámica, artículos de cristal, piedras preciosas, joyería y obras de arte, entre otros.
Es decir, prácticamente solo afectaba productos artesanos y a las obras de arte; mientras que, desde ese momento, además de ampliarse los sectores, las importaciones ya no tienen que cumplir tampoco con el requisito de hacerse de forma directa desde Cuba. Sin embargo, sigue prohibida la importación de alimentos, productos agrícolas, alcohol y tabaco, productos minerales, químicos, metales, maquinaria y equipos eléctricos, vehículos, armas o munición de Cuba.
