Después de una larga restauración, el Hotel Manzana Kempinski, administrado por la empresa hotelera especilizada en el segmento de lujo junto a la estatal cubana Gaviota, controlada por los militares, se dispone a abrir en La Habana. Una ocasión que marcará también la llegada de otras firmas especializadas en los clientes de mayores ingresos. Después de una larga restauración, el Hotel Manzana Kempinski, administrado por la empresa hotelera especilizada en el segmento de lujo junto a la estatal cubana Gaviota, controlada por los militares, se dispone a abrir en La Habana. Una ocasión que marcará también la llegada de otras firmas especializadas en los clientes de mayores ingresos.
Firmas como Versace, Armani, Montblanc, Lacoste, Longiness o L’Occitane en Provence, abrirán este sábado tiendas en la capital cubana aprovechando el espacio que se les ha concedio en la primera planta del citado hotel, el primero cinco estrellas plus que será inaugurado en la Isla, según inciden medios como 14 y Medio.
Una concentración de marcas de lujo hasta ahora inédita en el país caribeño donde tan solo en La Habana o en Varadero era posible encontrar alguno de estos productos, igualmente en hotles, pero en todo caso de forma dispersa; aunque sí confirma algunas tendencias que ya se habían detectado en estos años.
Así, tras el deshielo en las relaciones con EE.UU. Cuba ya ha experimentado ‘booms’ en sectores relacianados con el lujo o el segmento de ingresos más elevados a escala global con la celebración de desfiles internacionales de moda, como Chanel que celebró en La Habana en 2016 su primer espectáculo en Latinoamérica, o ferias de Arte que han atraído a marchistas de todo el mundo.
También, las autoridades cubanas han puesto en marcha una estrategia para diversificar su oferta turística y atraer a visitantes de ‘alta gama’. Con el incremento de visitantes esencialmente también por la llegada de nuevas visitas de EE.UU. se trata de aumentar el gasto por turista.
ste representante de la tercera generación de la dinastía Gucci.
De esta forma, en las inmediaciones del Centro Histórico de la capital cubana también se inaugurarán próximamente otros dos lujosos hoteles: el Packard con 300 habitaciones, y el Prado y Malecón. Incluso, según apunta diversos medios, se especual con que la zona de el Prado, podría convertirse en la «Milla de Oro» de la Isla.
