Según las estadísticas más recientes aportadas por el Ministerio de Salud Pública de Cuba, la esperanza de vida en el país al nacer es hoy de 78,45 años, aunque las mujeres llevan una notable ventaja sobre los hombres, pues en ellas tal expectativa llega hasta los 80,45 años, cuatro puntos más que para el sexo masculino. Según las estadísticas más recientes aportadas por el Ministerio de Salud Pública de Cuba, la esperanza de vida en el país al nacer es hoy de 78,45 años, aunque las mujeres llevan una notable ventaja sobre los hombres, pues en ellas tal expectativa llega hasta los 80,45 años, cuatro puntos más que para el sexo masculino.
Este excelente índice, a nivel de un país del primer mundo, en el caso de Cuba, una nación tercermundista y con una economía en constantes tropiezos, trae a la vez notables inconvenientes por la fuerte carga que ello representa para la economía y en especial para la seguridad social.
Ello preocupa a las autoridades y a no pocas familias que deben destinar ya crecientes esfuerzos y dinero para la atención a los ancianos, más aún cuando la tasa de natalidad sigue deprimida y una parte de los jóvenes ?sobre quienes debe recaer el desarrollo del país- se inclina por emigrar en busca de una mejor calidad de vida.
Y las estadísticas indican que el asunto va a más, pues según esos cálculos, toda persona que hoy arriba a las seis décadas tiene por delante 22 años más de vida, y en el caso de los que frisan los 80, pueden aspirar a casi nueve años más, lo cual indica que no falta mucho para que Cuba sea uno de los países más envejecidos del planeta.
