Según el vicepresidente del Consejo de Ministros cubano, José Luis Rodríguez García, la Isla crecerá algo más de un 4% en 2008, contra todos los pronósticos tras el devastador paso de los huracanes Gustav, Ike y Paloma. Según el vicepresidente del Consejo de Ministros cubano, José Luis Rodríguez García, la Isla crecerá algo más de un 4% en 2008, contra todos los pronósticos tras el devastador paso de los huracanes Gustav, Ike y Paloma. Según el funcionario, este año pasará a la historia como uno de los más difíciles para Cuba, “en el que se ha puesto a prueba la capacidad de resistencia, la flexibilidad de su economía y la posibilidad de redirigir de forma planificada los esfuerzos para enfrentar fenómenos que no están en nuestras manos”.
Sin embargo, y a pesar de este optimismo inicial, hay que tener en cuenta que las previsiones realizadas a principios de año por el vicepresidente Carlos Lage, apuntaban a un crecimiento del 8%. Parte de esta caída se debe también al desplome en el precio del níquel, una de las principales fuentes de ingreso de la Isla, y que ha caído cerca de un 50% desde mayo del pasado año.
